El monte Fuji ha sido durante mucho tiempo un elemento central del imaginario cultural japonés, y nada lo ha representado con más virtuosismo que la histórica serie de xilografías Treinta y seis vistas del monte Fuji de Katsushika Hokusai (1760–1849). El famoso grabador documenta el Japón del siglo XIX con un talento y devoción excepcionales, y rinde homenaje al campo, a las ciudades, a la gente y a su serena belleza natural. Producida en la cima de la ambición artística de Hokusai, la serie es una obra fundamental del ukiyo-e que le valió el reconocimiento mundial como maestro indiscutible de su oficio.
Los grabados ilustran la obsesión de Hokusai con el monte Fuji y el florecimiento del turismo doméstico a finales del período Edo. Del mismo modo que la vista de la montaña era muy apreciada por los viajeros que se dirigían por la carretera Tokaido a la capital Edo (Tokio en la actualidad), el monte Fuji se erige como telón de fondo infalible de cada una de las escenas de la serie. Hokusai captura el paisaje distintivo y el encanto provincial de cada escenario con colores vívidos y detalles exquisitos. La serie, que incluye la famosa estampa La gran ola de Kanagawa (también conocida como La gran ola), es un tesoro de la historia del arte internacional apreciado en todo el mundo.
Esta edición XXL, una de las pocas reimpresiones de toda la serie, rinde homenaje a los llamativos colores y las composiciones de Hokusai con un cuidado y magnitud sin precedentes. Encuadernada siguiendo la tradición japonesa de pliegos de papel con los bordes sin cortar, Treinta y seis vistas del monte Fuji reúne las 36 estampas originales y otras 10 que el propio artista añadió posteriormente. El presente volumen presenta una imagen encantadora del Japón preindustrial y es un monumento impresionante al arte de la xilografía.