Para vivir una experiencia extrema basta a veces con llevar hasta sus últimas consecuencias una decisión en apariencia simple. Es lo que hace el protagonista del relato que abre este volumen, sumido en una pintoresca espiral de absurdo, escatología, sexo oscuro y violencia física.
También extrema es la breve narración que cierra el libro, un delirio feroz de crueldad gratuita disfrazado de anodina anécdota cotidiana en un futuro espeluznante.
Entre ambos extremos, el romanticismo renuente y ácido del tercer cuento, un diálogo entre dos desconocidos que recorren de noche su ciudad.
Tres relatos inéditos que constituyen la ópera prima de un jovencísimo Lorenzo Silva y nos lo muestran ya como un excelente narrador, con el humor y el radical desparpajo de los veinte años.