El escritor argentino David Lagmanovich cultiva en Los cuatro elementos las distintas modalidades narrativas del microrrelato actual. Así, encontramos visiones de la realidad social contemporánea, fábulas modernas, reescrituras de textos célebres y una exploración de los límites de la brevedad, sin que tampoco falten cuatro aterradoras visiones de un posible fin de los tiempos. Pero, además, en estas piezas medita sobre las características del fenómeno mismo de la literatura, agregando siempre un elemento de humor, más delicado o más ácido según el caso, recursos que lo aproximan al lector.