La dinastía Borbón ocupa el trono de España desde 1700. Hasta hoy se han sucedido once monarcas, algunos de los cuales han dado mucho que hablar. Sin embargo, los tres primeros son habitualmente omitidos y apenas se les dedican algunas publicaciones; esta escasa importancia que se les otorga es injusta. Felipe V, el primer Borbón, protagonizó la transición a la nueva monarquía y con sus hijos y sucesores, Fernando VI y Luis I, consiguió dar a España un cambio trascendental. Fue un momento fascinante de la Historia, porque España comenzó a salir de la inercia inmovilista y conservadora de la dinastía de los Austrias, emprendiendo una nueva forma de entender el Estado, de gestionar la política y la economía. En este cambio tuvieron gran protagonismo los ilustrados que tanta prudencia y juicio pusieron en la gestión de gobierno, así como las esposas de Felipe V y Fernando VI, a las que también hay que reconocer su importancia. Y todo ello considerando que tanto las aptitudes de estos reyes, como su personalidad patológica, no facilitaron en nada el gobierno. El devenir que nos lleva al siglo XXI comenzó en 1700, con los primeros Borbones, en un momento histórico que se vivió entre locos y cuerdos.