Al poco de pubilcar mi prier trabajo sobre la Imapala, me invitaron en abril del 2008, a dar una conferencia en Seva (población de Osona, donde nació Àlex Crivillé) con el título ¿Por qué la Impala?. Es una pregunta recurrente, con muchos itinerarios para contestarla. Por ejemplo, su creador, el mismo Leopoldo Milá me contaba, Es el triunfo de lo sencillo. Yo cada vez que oigo pasar una cerca, -hacía entonces un gesto hacia su solapa- me pongo una medalla!. No deja de ser la mejor respuesta pues con los años (ya 60) y las generaciones, sigue viva y circulando. Su presencia ka demuestra útil, acertada y hace bueno el argumento de André Richard: La bellezza reside en la función. Si un objeto es útil, resulta bello.