La emergencia de la psicología transpersonal ha supuesto un paso cualitativo en el intento de comprensión del ser humano. Valorando e integrando todas las corrientes anteriores, abre un horizonte nuevo en el campo psicológico que, sin embargo, conecta con lo que siempre ha enseñado la filosofía (o sabiduría) perenne: no somos un contenido de la consciencia, sino la consciencia misma, Presencia consciente experimentándose en formas temporales.
La comprensión adecuada del ser humano requiere que se atiendan sus dos dimensiones: la psicológica (o personalidad) y la espiritual (o identidad). En esta especie de manual de bolsillo, el autor ofrece claves y recursos que buscan ayudar a comprender cómo se articulan ambos niveles para posibilitar una vivencia plena y armoniosa; en definitiva, para aprender a reconocer y vivir lo que ya somos. Con ese objetivo, junto con las claves que ofrece la psicología transpersonal, presenta un amplio y variado elenco de prácticas –psicoafectivas, atencionales y meditativas o contemplativas– con las que aproximarnos a nuestra compleja y paradójica realidad.