Josef Albers, uno de los más influyentes artistas-educadores del
siglo xx, formó parte de la Bauhaus alemana en la década de 1920. En
1933 emigró a Estados Unidos, donde durante dieciséis años ejerció la
docencia en el Black Mountain College. En 1950 pasó a la Universidad
de Yale como jefe del Departamento de Diseño, y tras su jubilación en
1958 fue nombrado profesor emérito de arte, condición que conservó
hasta su muerte en 1976. Distinguido con numerosos galardones y
títulos honoríficos, en 1968 fue elegido miembro del National
Institute of Arts and Letters, y en 1971 fue el primer artista vivo
al que se dedicó una exposición retrospectiva en el Metropolitan
Museum of Art de Nueva York.
Nicholas Fox Weber es director ejecutivo de la Josef and Anni Albers
Foundation.