¿Podemos hablar de democracia sin hablar de economía, sin hablar de internet, sin referirnos a los impactos de la crisis en las condiciones de vida de la gente? En estas páginas se pone de relieve que tenemos nueva sociedad, nueva economía y vieja política. Y ello nos obliga conectar los conflictos e inquietudes que el cambio de época genera en nuestro día a día con la transformación de las relaciones de poder político. La aparición del 15M y la movilización global del pasado 15 de octubre muestran que está surgiendo un espacio de colaboración y de acción que busca modificar la situación actual, yendo más allá del dilema mercado-Estado.
Los bienes comunes, las lógicas cooperativas, la capacidad de compartir son expresiones tradicionales alternativas al mercado, que han tomado nueva significación en el nuevo mundo que configura internet. En el texto se propone reforzar lo común. Se propone conectar los bienes comunes digitales, ambientales y económicos con la renovación política y democrática urgente y necesaria. Una democracia de lo común.