Tratar la política desde un punto de vista sociológico exige tener en cuenta no solo el conjunto de actores, procesos e ideologías que forman parte del entramado institucional sino también aquellos otros que están en su periferia. Es el caso, por ejemplo, de los nuevos movimientos sociales, actores que en muchos casos ocupan el terreno de los partidos políticos y sindicatos. Es también el caso de la democracia participativa, cada vez más extendida ante el descrédito de la democracia electiva. Y es igualmente el caso de ideologías como el ecologismo, el posfeminismo, el movimiento queer, etc.
Por otro lado, la comprensión de la política en el mundo contemporáneo tampoco puede obviar fenómenos como la globalización, la sociedad del conocimiento, los valores posmaterialistas, la contradicción cultural del capitalismo, etc. Incluso es necesario que tome nota de la aparición en la escena internacional de otros modos de entender la acción política, como el reformismo musulmán. Igualmente no puede dejar de lado asuntos tan actuales como el de la violencia.
Finalmente, y más importante, una interpretación sociológica de la política está obligada a tomarse en serio la desafección respecto a las instituciones, las altas tasas de abstención en los procesos electorales, la baja afiliación a partidos políticos y sindicatos, etc. En ese lugar donde la política se desvanece y pierde su aura habita la gente.
De estas y otras cosas trata el presente libro. Le resultará útil no solo al universitario, también a quien tenga curiosidad por conocer con cierta profundidad esos asuntos políticos que, muy a menudo, los medios de comunicación retratan y valoran con demasiada urgencia y acaloramiento.