Los poemas de Juhan Liiv, esquemáticos y minimalistas casi al modo de los haikus japoneses, como trazos simples de un cuadro abstracto, nos trasladan a la naturaleza estonia, nos hacen reflexionar sobre el sentido trágico de la existencia, sobre la belleza y la purificación.
Otras veces vienen impregnados de humor e ironía, de una sonrisa melancólica que derrumba los falsos preceptos del progreso materialista de la humanidad.
Dejémonos llevar por estos versos para que nos hagan sentir y pensar, y esbozar una sonrisa, o quizá sentir un estremecimiento al visualizar un paisaje natural bucólico bajo la nieve helada y romántica.