Un escritor, extravagante y caprichoso, se encuentra en sequía creativa y decide escribir sobre lo ocurrido en 1981 a un amigo apodado El Libio, un librero "de viejo", el cual le contó aquellos acontecimientos durante la primavera de 1999. Escribir esa historia, supondrá escribir de sí mismo, algo que no le hace mucha gracia al principio, pero que le hará descubrir por casualidades del destino asuntos insospechados. Buenas dosis de suspense hasta el desenlace de la novela, que supone la solución de un asesinato ocurrido tiempo atrás. La acción de La confesión del Libio se desarrolla y transcurre durante la actualidad, en una ficticia capital de provincia castellana. Una obra que nos hace penetrar de nuevo en el existencialismo literario, o en obras recientes de la literatura rusa como El pasadizo de Vladimir Makanin. Se ha dicho de esta novela: "…Carlos de Tomás, desde el despiece psicológico del protagonista nos describe una sociedad provinciana con todas las bondades y las miserias de estos últimos tiempos que nos tocan vivir. Y añade, una trama bien construida que nos mantiene en vilo hasta el final