Desde la pequeña (y célebre) ciudad de Fachantoná, conocida como la ciudad de las tres efes, por fría, fea y falduda, Manuel Mejía nos presenta una acerada sátira política, universal, en la que la voz del autor habla con libertad (y hasta con descaro), y renuncia al realismo para construir esta espléndida narración. Louis Guillaume, hijo de un abogado de provincias llamado Luis Guillermo Gachancetá, tras graduarse con honores y título de excelencia en el colegio de los Santos Sagrados Padres Martinianos de la Buena Fe y Benemérita Bondad, se matricula en la facultad de derecho por indicación de su padre. Allí conocerá a Covadonga García de los Montes y Pérez del Río, por la que sufrirá sus primeras fiebres de amor; será erigido el alumno más brillante de la facultad y terminará siendo elegido jefe de campaña electoral por un partido liberal y progresista. Inversamente, su padre se irá revelando como un auténtico incompetente.
Con estos ingredientes, el autor construye una magnífica novela cargada de humor, mediante la cual asistimos a los entresijos de una campaña electoral y al funcionamiento de las instituciones judiciales de un ficticio país latinoamericano, regido por departamentos gubernamentales como el «Ministerio del Desarrollo Turístico y Embellecimiento Nacional» o el «Ministerio de la Justicia Ética y Demás Sueños Etéreos».