Pura es una mujer lenguaraz, tal vez insolente en ocasiones, que aparenta tener un gran control y dominio sobre su vida. Sin embargo, ella sabe, aunque nunca se le ocurriría asumirlo públicamente, que su aparente calma puede romperse en el momento menos esperado.
Un día, sin más, un acontecimiento repentino la precipitará en el vacío de su mundo interior, obligándola a replantearse los recuerdos más dolorosos de su vida: durante este intento de huida de sí misma, descubre los placeres de un amor poco convencional.
En esta novela, irónica, divertida, ardiente e íntima, la autora sabe desarrollar un juego de ritmos que mantiene a las lectoras atrapadas desde el inicio. La precoz madurez literaria de Geovanna Galera nos invita a disfrutar de estas páginas, llenas de sentimientos extremos que cualquier persona puede experimentar, en las que se observa una notable evolución con respecto a su novela anterior.