A principios de siglo, la Sociedad para el Estudio de las Lenguas Interestelares envió a la lingüista terrestre Rachel Monteverde al planeta exterior Aanuk, para que estudiase la lengua y la cultura de sus habitantes.
El resultado de sus investigaciones fue una obra de más de trescientas páginas, El informe Monteverde: Primera aproximación al estudio de las lenguas del planeta exterior Aanuk, publicado como tesis doctoral de su autora al regreso de su viaje. Pocos años después, la doctora Monteverde decidió editar también una versión resumida del mismo, junto con el cuaderno personal que había escrito durante su estancia en Aanuk.