La India ha sido considerada durante mucho tiempo como la cuna del hinduismo, constituyendo su mitología la columna vertebral de la cultura india. En el transcurso de los siglos, estos mitos han sido adaptados para incorporar personajes nuevos o revisados, y siguen desempeñando un papel fundamental en la vida india moderna. Narrados nuevamente en esta obra en su abigarrado y dramático esplendor, se ocupan de los temas narrativos fundamentales de la creación, la conservación, el engaño y la concesión de gracia. También describen las principales deidades del panteón hindú –Shiva, Vishnú y Devi– y sus relaciones con antidioses, ninfas y ascetas. Extraídos de diversas fuentes, especialmente de los textos enciclopédicos –los Puranas–, los mitos se entienden desde los primeros siglos después de Cristo hasta el siglo XVI, transmitiendo su eterno atractivo y las enseñanzas religiosas que de ellos derivaron.