Los autores de este estudio, Georg Iggers y Wilma Abeles, ambos judíos, se conocieron en 1938 en Norteamérica, donde huyeron con sus familias para escapar de la persecución nacionalsocialista. Desde entonces, su vida es una empresa común poco habitual, como científicos de renombre internacional, como profesores universitarios y como defensores de los derechos humanos. Hasta hoy se han movido incansablemente entre América, Europa y Asia: enseñando, investigando, luchando por un mundo más justo. En las historias de las vidas de Georg y Wilma Iggers se refleja todo un siglo. Se cuentan entre los últimos representantes de una generación de académicos e intelectuales de formación europea que con sus vidas y su compromiso mantienen vivo el recuerdo de lo que los delirios ideológicos y la persecución han destruido de manera irreparable.