Lola es ¡Lola corazón de León! Rescata valerosamente a los animales en apuros y se los lleva en un avión especial a su pacífica reserva natural. Al menos por las noches. Por el día, en cambio, los cuadrúpedos se las hacen pasar canutas: ¡su gata Blancanieves no se deja acariciar! ¡Ojalá fuera tan confiada como la cabra del circo, Blanquita! Blanquita es tan rica, que Lola solo desea desatarla de su corta cuerda y ofrecerle su supernave espacial como nuevo hogar? A fin de cuentas, ¿para qué si no es Lola Corazón de León?