La cualidad distintiva del retrato fotográfico se basa principalmente en que debería mostrar o dejar intuir de manera genuina la personalidad del retratado, convirtiendo a la imagen en un elemento comunicativo, casi una tarjeta de presentación de dicho carácter. Simplicidad y sensibilidad se convierten en condiciones esenciales para lograr captar la expresión que distinguirá nuestra fotografía de cualquier otra.
Esta obra aborda las particularidades de la fotografía de retrato en sus distintas variantes, al mismo tiempo que da a conocer las claves necesarias para conseguir un resultado de calidad, tomando como punto de partida tan sólo un equipo básico y unos mínimos conocimientos sobre técnicas de retoque digital.
El retrato goza de entidad propia en el campo de la fotografía tanto por sus objetivos como por su metodología; descubrirá los trucos y técnicas precisas para encarar trabajos como la fotografía de grupos, el retrato de estudio o las consideraciones a tener en cuenta a la hora de gestionar el uso de la luz natural o artificial. Además, encontrará una interesante aproximación a las técnicas digitales para subsanar pequeños errores y mejorar en definitiva el aspecto de nuestros retratos.