Tratar de entender cómo se comportan las personas cuando toman sus decisiones económicas sin tener en cuenta cuestiones como la envidia, la empatía, o la falta de autocontrol puede conducir a desatinos.
La Economía ha estado, durante años, estudiando el comportamiento de los individuos sin tener en cuenta estos "pequeños detalles de la gente normal". Sin embargo, en los últimos veinte años los economistas experimentales han confirmado lo que ya sabíamos, por ejemplo, que la gente es envidiosa, aunque también altruista y cooperadora, pero sobre todo han puesto en evidencia con precisión en qué circunstancias todas estas características, tan humanas, suelen tener un impacto económico importante.
Al mismo tiempo, la economía experimental nos ha permitido ir separando los mercados en sus múltiples piezas para entender por qué, por ejemplo, ciertas subastas están abocadas al éxito o por qué surgen burbujas en las bolsas de valores. Los experimentos también nos han enseñado en qué circunstancias un buen trato por parte del empresario es recompensado con un mayor esfuerzo por parte de los trabajadores, sin que medie incentivo económico alguno.
Este libro le permitirá comprender aspectos de la realidad económica que la metodología experimental ha desvelado con mayor claridad. Le ayudará a entender, pongamos por caso, cómo se comporta la gente normal -gente como sus compañeros de trabajo, sus vecinos, o sus amigos- cuando toman decisiones, y por qué algunos mercados funcionan mejor que otros.