Requisados, raros, y curiosos son adjetivos que podrían convenir a la mayoría de los doscientos libros que en este catálogo y en la guía de la exposición se reproducen y comentan. Es tan sólo una pequeña parte de los muchos libros, revistas y folletos incautados apenas acabada la Guerra Civil. Los libros fueron depositados en la Universitat de València porque su biblioteca era, además, Biblioteca Provincial. Fueron ocupando un semisótano que las bibliotecarias llamaban el infierno, un término común en el vocabulario de las bibliotecas aunque aquí la referencia moral se doblaba con la reprobación del propietario, calificado con la nota infamante de “rojo”. Aunque el origen pueda ser distinto, todos han compartido largos años de secuestro y olvido y, sobre todo, un dramático origen común: la Guerra Civil y la derrota de la República.