¿Te imaginas un marco hecho con letras de metal? ¿O con pasta de sal, como una receta de cocina?¿Y fotos colgando de una cuerda, como si fuera ropa tendida? Tampoco habrás visto un marco cubierto con una foto para encuadrar otra, ni pinzas de pelo usadas a modo de marco, o una bandeja de pastel convertida en portafotos...
Si soñabas con un marco diferente para esa foto especial que hiciste en un momento irrepetible, ahora ya no tienes excusa para no hacerlo. Anímate y créalo con tus propias manos. Como muestran estas páginas, es mucho más fácil de lo que parece. Y al final, tendrás un marco único, especial y personalizado.