El libro quiere ser -dice el autor- "una especie de catequesis desordenada, nada sistemática, pero pegada al terreno. ¿Para gente joven? Pues, la verdad, no sé qué decir. Es cierto que los chicos y chicas de bachillerato y de la universidad están muy presentes tanto en los asuntos que trato como en el tono, la música y la letra de cada artículo; pero yo solo trato de reflexionar, con libertad y buen humor, sobre noticias, anécdotas, incidentes de la vida diaria".